Científicos han descubierto ciertas pistas sobre una futura gran extinción de especies en nuestro planeta, que estarían influenciadas por nosotros. ¿Debería la raza humana extinguirse por el bien del planeta Tierra? Descúbrelo a continuación.
Científicos han descubierto ciertas pistas sobre una futura gran extinción de especies en nuestro planeta, que estarían influenciadas por nosotros. ¿Debería la raza humana extinguirse por el bien del planeta Tierra? Descúbrelo a continuación.
Los desastres naturales y el cambio climático
El creciente número de desastres naturales que alrededor del mundo han acontecido en los últimos años, es más que evidente, y en parte siempre hemos sospechado que todo ello es debido al cambio climático. Todos estos desastres han traído la muerte a millones de seres vivos, entre ellos a los humanos.
El cambio climático no solamente provoca desastres naturales; hasta ahora también se ha sospechado que colabora en la extinción de especies enteras. Sin embargo, aún no hemos podido saber con exactitud en qué medida ni cómo afecta el cambio climático a todos los seres vivos.
- Ver más: Desastres naturales recientes
El creciente número de desastres naturales que alrededor del mundo han acontecido en los últimos años, es más que evidente, y en parte siempre hemos sospechado que todo ello es debido al cambio climático. Todos estos desastres han traído la muerte a millones de seres vivos, entre ellos a los humanos.
El cambio climático no solamente provoca desastres naturales; hasta ahora también se ha sospechado que colabora en la extinción de especies enteras. Sin embargo, aún no hemos podido saber con exactitud en qué medida ni cómo afecta el cambio climático a todos los seres vivos.
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Analizando las extinciones mediante el ADN
Un grupo de microbiólogos de Uppsala, en una colaboración internacional, han querido aclarar esta pregunta estudiando con detalle las variaciones genéticas en las moléculas del ADN de 40 especies de pájaro y a través de ello, han conseguido adivinar qué tan comunes han sido esas especies a lo largo de la historia.
¿Cómo se sabe que lo han adivinado? Se debe a que los científicos afirman hacer coincidir los indicadores de menor número de individuos en el ADN con las etapas de glaciación, de las cuales se tienen datos mucho más exactos y con los que se puede contrastar. Además, se ha podido ver que la última etapa de glaciación (que acabó hace unos 12 000 años) fue la que más especies de pájaro ha extinguido.
Debemos tener en cuenta que en esta ocasión el cambio climático no solo está influenciado, como hasta ahora, por los los ciclos naturales de la Tierra. Nosotros, los seres humanos, modificamos el ambiente a nuestro antojo y necesidades supuestamente superiores. Tal y como se concluye en el estudio mencionado anteriormente, estas modificaciones del hábitat natural obviamente afectan al clima y a las especies que dependen de él para sobrevivir.
Y no debemos de olvidar que aumentar la cantidad de especies depende también de que la cantidad de miembros de una especie original sea estable dentro de su hábitat, un ejemplo de ello son las Islas Galápagos, en la cual hay gran diversidad de especies únicas.
Un grupo de microbiólogos de Uppsala, en una colaboración internacional, han querido aclarar esta pregunta estudiando con detalle las variaciones genéticas en las moléculas del ADN de 40 especies de pájaro y a través de ello, han conseguido adivinar qué tan comunes han sido esas especies a lo largo de la historia.
¿Cómo se sabe que lo han adivinado? Se debe a que los científicos afirman hacer coincidir los indicadores de menor número de individuos en el ADN con las etapas de glaciación, de las cuales se tienen datos mucho más exactos y con los que se puede contrastar. Además, se ha podido ver que la última etapa de glaciación (que acabó hace unos 12 000 años) fue la que más especies de pájaro ha extinguido.
Debemos tener en cuenta que en esta ocasión el cambio climático no solo está influenciado, como hasta ahora, por los los ciclos naturales de la Tierra. Nosotros, los seres humanos, modificamos el ambiente a nuestro antojo y necesidades supuestamente superiores. Tal y como se concluye en el estudio mencionado anteriormente, estas modificaciones del hábitat natural obviamente afectan al clima y a las especies que dependen de él para sobrevivir.
Y no debemos de olvidar que aumentar la cantidad de especies depende también de que la cantidad de miembros de una especie original sea estable dentro de su hábitat, un ejemplo de ello son las Islas Galápagos, en la cual hay gran diversidad de especies únicas.
No todo está perdido
Teniendo en cuenta nuestra influencia en la extinción de especies, podemos llegar a la conclusión de que, en cierta forma, los humanos somos como una plaga. Pero debemos tener cuidado con este tipo de afirmaciones, porque hay quienes llevan esta reflexión al extremo de pedir la extinción de la raza humana por el bien del planeta.
¿Pero hace falta llegar a tal extremo? En absoluto.
Siempre hay alternativas a los problemas y ya hay iniciativas que intentan proteger a las especies del cambio climático: se ha demostrado científicamente que alterar la expresión de unos pocos genes que beneficien la defensa del organismo en unas pocas plantas, es suficiente para proteger a toda una población de vegetación y así alterar la biodiversidad.
Esta idea, llevada a gran escala, podría ayudar a mantener y aumentar el número de seres vivos de cualquier especie, mejor adaptada a cualquier condición que nosotros estemos preparados para mejorar.
Que podamos solucionar el problema, sin embargo, no debe hacernos olvidar de la importancia de estar concienciados sobre el estado del planeta y de sus necesidades. Las iniciativas nunca son suficientes si no se actúa en consecuencia ni los seres humanos cuidamos de nuestra propia casa, la Tierra.
- Ver también: 9 especies terrestres en peligro de extinción a causa del calentamiento global
- Ojo curioso.
Teniendo en cuenta nuestra influencia en la extinción de especies, podemos llegar a la conclusión de que, en cierta forma, los humanos somos como una plaga. Pero debemos tener cuidado con este tipo de afirmaciones, porque hay quienes llevan esta reflexión al extremo de pedir la extinción de la raza humana por el bien del planeta.
¿Pero hace falta llegar a tal extremo? En absoluto.
Siempre hay alternativas a los problemas y ya hay iniciativas que intentan proteger a las especies del cambio climático: se ha demostrado científicamente que alterar la expresión de unos pocos genes que beneficien la defensa del organismo en unas pocas plantas, es suficiente para proteger a toda una población de vegetación y así alterar la biodiversidad.
Esta idea, llevada a gran escala, podría ayudar a mantener y aumentar el número de seres vivos de cualquier especie, mejor adaptada a cualquier condición que nosotros estemos preparados para mejorar.
Que podamos solucionar el problema, sin embargo, no debe hacernos olvidar de la importancia de estar concienciados sobre el estado del planeta y de sus necesidades. Las iniciativas nunca son suficientes si no se actúa en consecuencia ni los seres humanos cuidamos de nuestra propia casa, la Tierra.
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- Ojo curioso.
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