Mis viajes al Pico Duarte
La primera vez que subí al Pico Duarte fue en el 1990, del 3 al 8 de enero esto así porque perdimos dos días uno en sabaneta y uno en la Ciénaga de Manabao, en Sabaneta fue que no pudimos encontrar el guía a tiempo y tuvimos que amanecer allá, una señora llamada Isolina nos prestó una casa que tenía alquilada al partido de Vincho Castillo, en la que dormimos esa noche. Ese viaje fue organizado por Asodemu, el sindicato de trabajadores de la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
De aquel viaje recuerdo que Elsa era la encargada y que Rafael (Manego) un gran amigo de Pueblo Viejo en Azua que por ese tiempo vivía el km8 de la carretera Sánchez, fue el que me motivo a ir, incluso me pagó el viaje, en ese viaje fueron Francis, Alido, Eulogio, Eugenio, Fernando Ania, Santiago, Carmen, y Elsa que era la encargada a demás de cuatro miembros de la Defensa Civil, De la Rosa, Ricki, Duran y Elías
Nos fuimos por San Juan, saliendo de Sabaneta y llegando a la Cienaga de Manabao, en Jarabacoa, Reynaldo Matías (Nano) ya fallecido fue nuestro guía, recuerdo que fue un viaje inolvidable que me marcó para toda la vida, todas las vicisitudes del viaje, las largas caminatas, el compañerismo, los paisajes espectaculares, las noches inmensas y frías, con sus estrellas lejanas y tristes la alegría de alcanzar la cima más alta de las Antillas, llegar a la Ciénaga donde tuvimos que quedarnos un día más porque la guagua de la UASD que debió ir a buscarnos, no fue.
Allí, en la Cienaga nos quedamos un día más, hicimos una colecta entre todos y al otro día partimos en transporte público, esa fue mi primera experiencia por esas montañas de la cordillera Central
Después se sucedieron otros viajes hasta que en 1997 los muchachos de los grupos estudiantiles ( UNER, FELABER Y FEFLAS) de la UASD organizaron uno para conmemorar el 30 aniversario de la caída del CHE en Bolivia en el cual participo de manera activa, ese viaje se hizo la Ciénaga, la Ciénaga (en Manabao, Jarabacoa) al regreso me pongo en contacto con Jaime Rodríguez de la UNER y acordamos organizar todos los años viajes a la cima más alta de las Antillas.
Recuerdo que el primer viaje lo organizamos por San Juan, saliendo de Sabaneta, en ese viaje contactamos otros grupos como fueron el MIEL en la UASD con Sandy a la cabeza, periódico el Convite de Barahona, con Raúl Rojas, Abriendo Camino de Azua con Yova Sánchez y el Club Gregorio Luperón del km8 de la carretera Sánchez en el Distrito Nacional, conmigo como representante.
Estos primeros viajes lo pensamos como viajes de endurecimientos con la mochila arriba, sin casas de campañas, sin mulas de monta, sin radios de comunicaciones etc. En esos primeros viajes nos bautizaron como la brigada Ernesto Che Guevara porque siempre andábamos con una bandera del Che como estandarte, de esos primeros viajes recuerdo a Vitico, José Luís, Magna, José de la Cruz, Mártires, Raúl, Yova, Jaime, Luís, Ramón, Martín, Bantroy, Nauris, Otto, Sandy, Manuel Cuevas (química) Jorge, entre otros cuyos nombres se van perdiendo en el tiempo, también viajaron con nosotros personas de España, Haití, Japón y el país Vasco, del interior del país de Santiago, san Cristóbal, San Francisco, Mao, Higuey, Azua, Barahona etc.
Después se generó un debate sobre el nombre y en una reunión se acordó cambiarle el nombre por el de Brigada Ecológica Aniana Vargas, no estuve de acuerdo con el cambio de nombre ya que llevaba con orgullo sobre mis hombros la bandera del Che Guevara y el origen de grupo estuvo en ese gran personaje de la historia universal y no es que reniegue del nombre de Aniana Vargas, ella fue una gran mujer, una luchadora infatigable por la libertad y la ecología del país, aunque repito no estuve de acuerdo con el cambio de nombre, mientras estuve en la brigada levanté bien alto el nombre de Aniana Varga.
Hicimos todas las rutas conocidas y nos inventamos otras, como ir de Constanza a San Juan y de Azua a Mata Grande entre otras, ese fue nuestro atractivo nunca repetir una misma ruta, eso también nos hizo famosos entre los viajeros que todos los años suben al techo de las Antillas, a demás de nuestra forma de viajar, nunca dejamos a nadie atrás y somos solidarios con los viajeros que encontramos en esos caminos solitarios de la cordillera Central y en más de una ocasión tuvimos que socorrer a más de un viajero, esa actitud nos hizo ganar un nombre, entre los guías y los caminantes.
De los guías recuerdo a Pedrito y sus hijos, que sin conocernos en el Valle del Tetero en medio de un aguacero puso su casa a nuestra disposición a él su esposa y sus hijos va mi tributo desde aquí, a Francisco y los demás guías de San Juan a Nardo, Samba, Yuli y los demás guía de Azua, a Vitico, Ramón y sus familias por todas las atenciones que siempre nos prestaban al llegar a Mata Grande, va mi homenaje a todos los guías de todas las rutas y a los encargados de cuidar esa vastas regiones en condiciones inhumanas, a todos ellos va mi humilde reconocimiento y espero que un día el gobierno los tome en cuenta y les de el trato justo y humanitario que se merecen.
Brigada Cimarrona Sebastián Lemba.
laesperillasos@hotmail.com
829 494 0819
No hay comentarios:
Publicar un comentario